Con el ingreso de China en la Organización Mundial
del Comercio en el 2001, creció mucho el comercio y esto llevó
naturalmente a un boom de la inversión. Es así como China otorgó
US$102,000 millones en préstamos a América Latina entre el 2005 y
2013.
No hay nada más
simbólico de la presencia china en la región que la reciente adquisición
de la mina Las Bambas en nuestro país por parte del consorcio chino MMG, liderado por la estatal Minmetals
Corp. como parte de la implementación de reformas económicas, China ha
fomentado un sistema de flujos financieros de su banca estatal que permite a
las compañías desembolsar grandes sumas y a los gobiernos de una región,
específicamente América Latina, financiar inversiones sociales o proyectos de
infraestructura. El desembarco chino en la región se ha caracterizado por este
desplazamiento o absorción de firmas privadas occidentales con gigantescas
inversiones de compañías o consorcios estatales.
De ese modo, el
gigante asiático estableció que en vez de comprar el cobre de una
empresa en América Latina, era mejor adquirirla o ganar una participación
mayoritaria para tener un mayor control. La estrategia china es una compleja
integración de su sector financiero y productivo. De acuerdo con un estudio,
realizado por el Instituto de Gobernanza Económica Global (GEGI, por sus siglas
en inglés) de la Universidad de Boston, las cinco principales inversiones del
gigante asiático en la región se concentran en el sector hidrocarburos.
PRINCIPALES INVERSIONES
EN SUDAMÉRICA
En el reino de las
grandes inversiones del gigante asiático la estrella es el petróleo. Tres
compañías chinas (Sinopec, CNPC y CNOOC) se disputan el conjunto de las
inversiones en este sector:
1. Venezuela,
Se destaca el
acuerdo con China National Petroleum Corporation (CNPC) para la inversión de
US$28,000 millones en un nuevo proyecto en la Faja Petrolífera del Orinoco. A
este negocio, acordado en 2013, se añadió otro por US$14,000 millones con la
petrolera estatal China Petroleum & Chemical Corporation (Sinopec).
2.
Brasil,
Sinopec, la más
grande refinadora china, adquirió el 40% de la española Repsol por US$7,100
millones en 2010 y, el siguiente año, expandió sus operaciones con la
adquisición del 30% de las operaciones de la portuguesa GALP. Las dos
operaciones son una clara indicación de la presencia de Sinopec en Brasil y de
la estrategia china de adquisición parcial o fusión con compañías que ya están
funcionando. En tanto, esta estrategia no se limita a Brasil, 2 meses
después de su inversión en Repsol, Sinopec adquirió en Argentina la
estadounidense Occidental Petroleum por US$2,450 millones.
3.
Argentina,
La China National
Offshore Oil Corporation (Cnooc) es la segunda petrolera en el país gaucho
detrás de la nacionalizada YPF. La inversión madre tuvo lugar en marzo del
2010 cuando Cnooc compró el 50% de la petrolera argentina Bridas por US$3,100
millones. Asimismo, la nacionalización de YPF en 2012, que generó conflicto de
intereses en varias naciones de occidente, no perturbó a China que en enero del
2013 se asoció a la estatal petrolera argentina para la explotación de petróleo
de esquito en la gigantesca reserva de Vaca Muerta.
4. Perú,
Después del sector
energético (petróleo y gas), en nuestro país, es la minería la que concentra la
mayor inversión china en la región. Con la compra de Las Bambas, China
elevó su inversión en proyectos mineros a US$19,000 millones. Hoy, la economía
asiática controla un 33% del sector minero peruano.
PROYECTOS
EN CARTERA DE INVERSIÓN
El sector minero
nacional, actualmente posee una cartera estimada de proyectos mineros que superan
los US$ 60,900 millones, los cuales se concentran en 54 proyectos, según la
Guía de inversión minera del Perú 2015/2016 elaborada por la consultora EY
(antes Ernst & Young). El reporte precisa que 10 de los proyectos son
ampliaciones, 16 cuentan con el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) aprobado, 4
aún tienen el EIA en evaluación y los 24 restantes en espera.
En ese sentido, la
cartera de inversiones se distribuye en: 62.94% (US$ 38,356 millones) en
proyectos de explotación de cobre, 16.46% (US$ 10,031 millones) en producción
de oro y 9.03% (US$ 5,500 millones) en proyectos de hierro. Asimismo, el 5.59%
(US$ 3,404 millones) son proyectos polimetálicos, 3.07% (US$ 1,870 millones) de
fosfato y 1.34% (US$ 816 millones) en explotación de zinc.
Finalmente, las
estadísticas y rankings globales, muestran que el Perú es uno de los destinos
más atractivos para la inversión minera; esto es gracias a su alto nivel de
reservas, su marco jurídico promotor de la inversión privada, la disponibilidad
de información catastral y geológica y la presencia de empresas líderes de la
minería mundial.
FUENTE:
Diario Gestión, EY
No hay comentarios:
Publicar un comentario